Dr. Antonio Matamoros

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VACUNACIÓN: EL PRIMER PASO EN LA PREVENCIÓN

Las consultas médicas preventivas anuales permiten la generación de un espacio para recibir información acerca de promoción de la salud y prevención de enfermedades; fortalecen la relación con el médico, dándole un rol fundamental en el cuidado de su salud.

De acuerdo con la edad, particularidades de la historia familiar, hábitos y estilo de vida, el médico recomendará conductas que incluyan, entre otras, orientaciones en torno a:

  • Alimentación, actividad física y otros hábitos saludables.

  • Control de factores de riesgo.

  • Prevención de accidentes.

  • Prevención de adicciones.

  • Prevención de enfermedades.

  • Detección precoz de cáncer de colon en mayores de 50 años.

  • Detección de riesgo de enfermedad cardiovascular, en mayores de 45 años.

 VACUNACIÓN EN ADULTOS

Se recomiendan vacunas para adultos en función de su edad, vacunas anteriores, salud, estilo de vida, ocupación, destinos de viaje y actividad sexual.

Entre las vacunas para adultos que debes considerar, se encuentran las siguientes:

  • Vacuna contra influenza. Para prevenir la gripe o influenza, se recomienda la vacunación anual para todas las personas a partir de los 6 meses de edad.

  • Vacuna antineumocócica Las enfermedades neumocócicas causan infecciones como neumonía, meningitis e infecciones del torrente sanguíneo. Se recomiendan las vacunas antineumocócicas para adultos mayores de 65 años.

    Los adultos jóvenes con mayor riesgo de contraer enfermedades neumocócicas también podrían necesitar una dosis de la vacuna.

  • Vacuna contra el toxoide tetánico, el toxoide de difteria reducido y la tos ferina acelular. Esta vacuna brinda protección contra el tétanos, la tos ferina y la difteria, que pueden causar problemas respiratorios.

    • Se recomienda un refuerzo cada 10 años.

    • Se administra rutinariamente a la edad de 11 o 12 años.

    • También se recomienda una dosis de la vacuna durante cada embarazo, preferentemente entre la semana 27 y 36 del embarazo.

  • Herpes zóster Para prevenir el herpes zóster se  recomienda la vacuna para adultos sanos mayores de 50 años. Aunque no es mortal, el herpes zóster puede ser muy doloroso.

  • Vacuna contra el virus del papiloma humano (VPH). El virus del papiloma humano es un virus común que puede causar cáncer.

    • Se recomiendan la vacuna contra el virus del papiloma humano para niñas y niños desde los 11 o 12 años.

    • Los adolescentes y adultos jóvenes que comienzan a recibir la serie de vacunas más tarde, entre los 15 y los 26 años, deben recibir tres dosis de la vacuna.

VACUNAS PARA NIÑOS

Las vacunas para niños los protegen de una variedad de enfermedades graves o potencialmente mortales, como la difteria, el sarampión, las paperas, la rubéola, la poliomielitis, el tétanos, la tos ferina y otras.

 De todos modos, es posible que tenga dudas sobre los beneficios y riesgos de las vacunas para niños. Aquí presentamos algunas respuestas:

 ¿Es la inmunidad natural mejor que las vacunas?

Una infección natural puede inmunizarnos mejor que las vacunas, pero existen riesgos graves.

  • Por ejemplo, una infección natural de varicela podría derivar en neumonía.

  • Una infección natural de poliomielitis podría causar una parálisis permanente.

  • Una infección natural de paperas podría derivar en sordera.

  • Una infección natural de haemophilus influenzae tipo B podría causar un daño permanente en el cerebro o incluso la muerte.

Las vacunas pueden ayudar a prevenir estas enfermedades y las posibles complicaciones graves.

¿Son peligrosos los efectos secundarios de las vacunas?

Todas las vacunas pueden presentar efectos secundarios.

Por lo general, estos efectos secundarios no son graves: fiebre baja, nerviosismo y un poco de dolor en el lugar donde se colocó la inyección.

Algunas vacunas causan dolores de cabeza temporales, fatiga o pérdida del apetito.

Son muy raros los casos en que los niños pueden experimentar reacciones alérgicas graves o un efecto secundario neurológico, como una convulsión.

Aunque estos efectos secundarios poco comunes son motivo de preocupación, existen muy pocos riesgos de que una vacuna cause lesiones graves o la muerte.

Los beneficios de colocarse una vacuna son mucho mayores que los posibles efectos secundarios en casi todos los niños.

 Indudablemente, las vacunas no se colocan a los niños que tienen alergias conocidas a determinados componentes. Igualmente, si su hijo desarrolla una reacción a una vacuna que ponga en peligro su vida, no se le colocarán las dosis restantes de dicha vacuna.

¿Por qué las vacunas se colocan a tan temprana edad?

Las enfermedades que se busca prevenir con las vacunas para niños tienen más posibilidades de desarrollarse a temprana edad, cuando el riesgo de sufrir complicaciones es mucho mayor. Por eso, es fundamental vacunar a los niños pequeños, incluso desde los primeros meses de vida. Si pospones la vacunación hasta que el niño sea más grande, podría ser demasiado tarde.

¿Está bien colocarse solo algunas vacunas?

En general, no es bueno saltarse algunas vacunas. Esto podría hacer que su hijo quede expuesto a enfermedades potencialmente graves que pueden evitarse.

Animamos a colocarse anualmente la vacuna contra la influenza por disminuir significativamente problemas para pacientes con enfermedades pulmonares; diabetes o problemas al corazón. Así mismo, la influenza aumenta significativamente la ausencia laboral.